Ya sabemos que, para una buena higiene bucodental, el cepillado es esencial, pero aún es preciso añadir dos pasos más: el uso del hilo dental y del enjuague bucal.
En esta entrada vamos a descubrir la importancia que tiene el uso de colutorios en la salud de tu boca, cómo usarlo y de qué nos previene.
¿Para qué sirve?
Ayuda a mantener sanos los dientes y las encías, incluso los lugares más inaccesibles de la boca. Además, de reforzar el esmalte de los dientes, evita y reduce la formación de placa dental y, con ello, la prevención de problemas en las encías.
¡Pero si ya me he cepillado los dientes !
Aunque creas que con el cepillado hemos cumplido, debes tener en cuenta que por muy profesional y completo que sea nuestro cepillo no va a llegar a todos los lugares de nuestra boca. Recuerda que hay otros elementos a cubrir: las líneas de las encías, los espacios interdentales, la lengua…por lo que tras un correcto cepillado y el uso del hilo dental, se hace preciso el enjuague.
¿Qué sucede en nuestra boca?
Los carbohidratos se descomponen en azúcares mediante nuestra propia saliva, constituyendo el sustento de los gérmenes existentes. Éstos son los causantes de las enfermedades bucales: la caries, la sensibilidad dental, la halitosis (mal aliento), etc.
Además, los gérmenes son los causantes de la llamada placa dental que es una de las principales causas de la gingivitis. También puede calcificarse y producir el sarro que, al ser más poroso que el esmalte, originará manchas en los dientes.
Cómo usar el enjuague bucal
Se recomienda utilizar el enjuague bucal dos veces al día de la siguiente manera:
1º Normalmente la dosis viene a ser de unos 15 ml. que debes verter en el tapón destinado a ello.
2º No lo diluyas en agua.
3º Una vez en la boca, realizar movimientos de enjuague al menos durante medio minuto, de manera que distribuyas el colutorio por todos los lugares.
4º Expulsa el líquido donde consideres conveniente.
Los beneficios
Si incorporamos a nuestra higiene bucal este hábito, obtendremos un eficaz efecto antibacteriano, cuidaremos las encías, eliminaremos placa dental y será nuestro más fiel aliado contra el mal aliento.
¿Qué tipos de enjuagues bucales existen?
Dependiendo de su composición, podemos establecer dos grandes grupos:
- Básicos: su función es la de complementar al cepillado y su uso fundamental es el de eliminar restos de comida y proporcionar frescura al aliento, aunque su efecto no sea prolongado. Se puede decir que es el colutorio específico para bocas sanas. Dentro de estos enjuagues básicos podríamos seleccionar entre:
- Sin alcohol, dirigido a dentaduras y encías sensibles; muy recomendado para la gingivitis.
- Específos para combatir la halitosis, atacando las sustancias que la producen.
- Antisépticos: además de refrescar el aliento, tienen un efecto
- Anticaries: con un mayor contenido en flúor.
- Antiséptico: usados para combatir la placa dental bacteriana.
- Especiales (post tratamientos dentales): Su componente esencial suele ser Clorhexidina en diferentes porcentajes. Para después de tratamientos como extracciones, implantes o cualquier tipo de cirugía.
…y recuerda:
- Sigue siempre los 3 pasos: cepillado, hilo dental y enjuague bucal.
- El enjuague bucal por sí solo no consigue sus efectos, por lo que en ningún caso obvies los dos primeros pasos.
- No descuides tus citas en nuestra Clínica Dental en Sevilla. Como dentistas sabremos asesorarte en qué producto es el más idóneo para tu boca.